Por Marcela Correa
Lograr la reología idónea de aplicación, combinado con una buena
estabilidad en sistemas acuosos como
pinturas e impermeabilizantes, es un desafío que debe de ser enfrentado por los
fabricantes. Aunque existan recomendaciones en la ficha técnica del proveedor,
también hay maneras de ajustar o calcular el porcentaje de aditivos implicados
en el sistema (como en el caso de los dispersantes), la cantidad que se debe
usar depende del tipo y cantidad de cargas y pigmentos reales dentro de la
formulación.
La fase de dispersión y estabilización de pigmentos y cargas constituyen
la parte de mayor complejidad en el proceso de fabricación. Estas materias
primas en suministro, están formadas por agregados cuyo tamaño de partícula es
superior al de las partículas discretas de los mismos. Las causas de estas
aglomeraciones son la humedad y la compactación a la que están sometidos los
productos, esta última debido al fuerte efecto ejercido por las fuerzas de Van
der Waals entre las partículas constituyentes.
En el proceso de dispersión se lleva a cabo la separación de las
partículas discretas que conforman los agregados y conglomerados, llenando los
huecos con una mezcla de disolvente y
ligante, con ayuda de una agitación a alta velocidad. El dispersante tiene la
función de estabilizar la dispersión obtenida por el efecto de cizalla a alta
velocidad.
Los dispersantes tienen en ocasiones características humectantes y
dispersantes en un solo producto, estos aditivos son moléculas polares,
preferentemente con dos o más grupos polares. Gracias a la afinidad de estos
grupos con los pigmentos y cargas, se establecen entre ambos interacciones de
tipo puente de hidrógeno, Van der Waals o dipolo a dipolo. La parte apolar
queda libre y las partículas se mantienen separadas a causa del impedimento
estérico que provocan las propias cadenas apolares de las moléculas del
dispersante.
Este tipo de aditivo es esencial en sistemas acuosos para lograr una
buena estabilidad, el cálculo de la cantidad de dispersante necesario, se
determina mediante un ensayo consistente de añadir en forma paulatina el
dispersante hasta que se observa una pérdida brusca de viscosidad. El ensayo se
lleva a cabo en un agitador de laboratorio, se pone agua en el recipiente donde
se efectuará la dispersión, sin ningún otro aditivo, con una cantidad de
dispersante determinada, por ejemplo 0.1% calculado en peso sobre pigmento. Se
añade el pigmento y cargas en agitación y se procede ir añadiendo de 0.1% en
0.1% el dispersante hasta que la viscosidad cae de forma brusca (hasta el mínimo
nivel), en este punto la cantidad de dispersante añadido es la demanda
necesaria del mismo para obtener una buena dispersión.
Si yo trabaje en compañia de pinturas Pintuco (Rionegro, Colombia) y monte el sistema e hive todas las pastas de tinturar con un sistema parecido y me dió muy buenos resultados, e implementé el sistema, saludos. Alvaro Hernandez Vidal.
ResponderBorrarMuchas gracias por estos tips.
ResponderBorrarSaludos!!!
Muy buenos comentarios,Se puede hacer lo mismo para la humecgancion??
ResponderBorrarSe puede hacer la misma prueba para la humectacion??
ResponderBorrarSe supone, que cuando se hace el trabajo del dispersante en el sistema se usa un surfactante, según recomendación del fabricante.
ResponderBorrarAlvaro Hernandez